Finalmente, el 2 de febrero, la multinacional tecnológica Apple ha lanzado al mercado probablemente su producto más esperado: las gafas Apple Vision Pro. No se puede apropiar el concepto de realidad virtual a estas gafas, ya que su contenido digital está proyectado en el entorno del individuo que las lleva. Ante este nuevo tipo de realidad, Apple lo ha denominado como “realidad extendida”, donde el campo de visión abarca 360 grados.
Apple ha diseñado estas gafas de forma traslúcida para diferenciarlas de las comunes gafas de realidad virtual, que cada vez se utilizan más en videojuegos. Aunque los ojos de la persona que las lleva son visibles, los elementos de las aplicaciones se superponen al mundo real. La interfaz es similar a la de los productos anteriores de la compañía. Para desplazarse y navegar por las aplicaciones, el usuario simplemente debe interactuar con sus dedos.
Frente a la ausencia del Face ID para bloquear y desbloquear el dispositivo electrónico, Apple ha desarrollado el Optic ID. Aunque ambos sistemas son de reconocimiento, la clara diferencia es que el Optic ID utiliza el iris del individuo como autenticación para las gafas.
Aunque las Vision Pro pueden parecer unas gafas de realidad virtual más en el mercado, están orientadas tanto al uso productivo en el trabajo como al ámbito del ocio. A pesar de que parece imposible realizar videollamadas con las gafas, Apple ha creado un sistema en 3D, similar al Face ID de los iPhone, que registra la cara del usuario. Tomando miles de puntos de referencia del rostro, el sistema puede generar un avatar que participa en las videollamadas.
Las gafas parten de dos procesadores, M2 y R1. El chip M2 ya se ha utilizado antes en otros productos de la compañía como el Mac mini de 2023 o el iPad Pro. Pero el chip ha sido modificado para que sea más silencioso y así aún más eficiente. La incorporación de un nuevo chip R1 ayuda a procesar las imágenes con baja latencia, es decir, permite disminuir el retraso que se produce desde que se realiza la emisión de la imagen hasta que la recibe el individuo que lleve las gafas. Constan de doce cámaras y cinco sensores LiDAR. Al poder haber nueve imágenes por segundo, contribuye a la disminución de posibles mareos que pueden producir unas gafas de realidad virtual.
Ha habido ya varias personas que han podido experimentar el uso de las gafas Vision Pro, como en el metro de Nueva York. Pero este producto está sólo y exclusivamente en estos momentos en Estados Unidos partiendo de 3.499 dólares. Las demostraciones de Apple al público son en entornos cerrados, es decir, las gafas se diseñaron principalmente para su uso en interiores. Una característica que indica nuevamente su idea de utilizarse en espacios interiores es la duración de la batería externa, la cual dura hasta dos horas.
Se desconoce si la multinacional Apple acabará ofreciendo este innovador producto a otros mercados del mundo para que el resto de las personas puedan experimentar las gafas Vision Pro. La compañía esperará un tiempo indeterminado para ver de qué manera su nuevo producto se adapta y es aceptado en el mercado tecnológico de Estados Unidos.